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Mujeres Sarayaku, la resistencia contra el extractivismo y el patriarcado

Las mujeres del pueblo Sarayaku juegan un papel crucial en la resistencia de su comunidad frente a los intentos de extracción de la riqueza energética. Ellas han alzado su voz para decir “¡No!” al extractivismo y al patriarcado, decididas a resistir tanto a la explotación petrolera pretendida por intereses económicos como al patriarcado ancestral que enfrentan a sus comunidades.

El Pueblo Originario Kichwa de Sarayaku está ubicado en la Amazonía del Ecuador, en la provincia de Pastaza, en el curso medio de la cuenca del río Bobonaza. Está integrado por 7 centros comunitarios en un territorio de aproximadamente 135 mil hectáreas. El 95 % del territorio de Sarayaku es bosque primario, con una alta biodiversidad.

El pueblo Sarayaku se opone desde hace décadas a la actividad petrolera en su territorio. Pero a pesar de su negativa a la actividad extractiva, el Gobierno autorizó la entrada de la empresa CGC de origen argentino. Esta empresa llevó a cabo numerosas perforaciones y sembró la zona de explosivos de alto poder para la exploración sísmica hidrocarburífera entre entre finales de 2002 e inicios de 2003. Hombres, mujeres y niños de Sarayaku se movilizaron entonces contra esta actividad.

Tras una ardua lucha legal durante 2004 y 2005, la Corte Interamericana dictó Medidas Provisionales a favor del pueblo, incluyendo la disposición de que el Estado retire los explosivos sembrados por la CGC.  Finalmente, a inicios de 2010 la Comisión Interamericana emitió su resolución respecto al Caso Sarayaku.

Derecho a la tierra

Para este pueblo, la explotación indiscriminada de la tierra contraviene el derecho de la tierra misma a mantenerse íntegra y a continuar regenerando la vida humana y no humana. Sarayaku protege lo que en kichwa llaman kawsak sacha: la selva viviente habitada y animada por animales, aguas, montañas y las rocas de la selva. De ahí que las decisiones del pueblo se toman después de consultar no solo a todos sus integrantes sino también a la selva viviente,

En  su lucha, el pueblo Sarayaku ha tendido puentes y ha influido en nuevos movimientos sociales, desde la movilización de jóvenes por la acción climática hasta las campañas y casos por los derechos de la naturaleza.

Sus mujeres han jugado un papel crucial en la resistencia de su comunidad frente a los intentos de extracción de la riqueza energética. Ellas han alzado su voz para decir “¡No!” al extractivismo y al patriarcado, decididas a resistir tanto a la explotación petrolera pretendida por intereses económicos como al patriarcado ancestral que enfrentan en sus comunidades.

medicusmundi Araba y medicusmundi Gipuzkoa queremos  dar a conocer la lucha de este pueblo por la defensa de su territorio, sus formas de vida y su cultura a través de estos vídeos: