"Esta declaración representa un hito para la salud y el desarrollo mundial", dijo el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la Organización Mundial de la Salud.

La ONU ha aprobado la Declaración sobre la Cobertura Sanitaria Universal (CSU). Según la Organización Mundial de la Salud, se trata de un hecho histórico sin precedentes. La OMS ha estado implicada con los principios de Cobertura Sanitaria Universal durante años, asegurandose de que fuese uno de los subobjetivos de los ODS3, (3.8) y de que el tema se discutiese en una reunión de alto nivel en la Asamblea General de la ONU. Por fin se ha  sellado con una declaración de la ONU.

En un sentido amplio, la Cobertura Sanitaria Universal es un principio básico para fortalecer los sistemas de salud y hacer que sea accesible para todas las personas. El concepto comprende tres dimensiones: Todas las personas deben tener acceso a la atención sanitaria, los servicios deben ampliarse para cubrir sus necesidades, y las poblaciones deben poder acceder a ellos si enferman,  independientemente de su situación económica.

La Declaración de las Naciones Unidas  fue objeto de un intenso debate en las negociaciones de este verano. Una vez más, una coalición de gobiernos conservadores se resistió a la mención de la salud y los derechos sexuales y reproductivos. Un debate que duró hasta poco antes de la Asamblea General de la ONU, de modo que el Consejo Federal finalmente se abstuvo de enviar su propia delegación a Nueva York, y dejó la representación de la misión suiza ante la ONU.

Nuestra red Medicus Mundi International ha cuestionado dos aspectos ante la ONU: En primer lugar,  la importancia de las responsabilidades que deben asumir los gobiernos nacionales debería especificarse más claramente, en lugar de mezclarlas entre muchas partes interesadas. En segundo lugar, la cooperación internacional en materia de salud debe centrarse en garantizar que su trabajo con las políticas de salud de los distintos países sea coherente y no debilite aún más los sistemas de salud debido a las prioridades individuales.

De acuerdo con la declaración de política global en Nueva York, la implementación a nivel estatal es el requisito indispensable para que la Cobertura Sanitaria Universal se pueda llevar a cabo: ¿Pueden las organizaciones no gubernamentales nacionales y las comunidades locales responsabilizar al gobierno? ¿Cómo organizan estos actores clave su trabajo de incidencia sin permanecer demasiado fragmentados debido a los diferentes intereses de los activistas del SIDA o las personas comprometidas con los derechos sexuales? Y finalmente, ¿cómo se financia este trabajo de incidencia, que es tan importante para el Acceso Universal de la Salud, pero en el que ni los gobiernos nacionales ni los donantes internacionales están realmente interesados?

Martin Leschhorn Strebel, Red Medicus Mundi Suiza