La salud no es un juego. Sin embargo, el azar tiene mucho que decir a la hora de determinar cuántos años viviremos. Y es que, el barrio o lugar en el que residimos y, en definitiva, el código postal en el que nos ha tocado nacer y vivir condiciona nuestra esperanza de vida. Ello se debe a que factores tales como la educación, la ocupación, los ingresos, el modelo de ocio, los niveles de contaminación y la alimentación son determinantes sociales que definen, al menos en parte, nuestra esperanza de vida. Tal y como reconoce la Organización Mundial de la Salud, OMS, todos estos elementos tienen un impacto directo en la salud de las personas.